3

Adiós a Philip Seymour Hoffman, adiós a uno de los mejores actores norteamericanos.

 Philip_Seymour_Hoffman_2011

Una semana que ya nos había dejado la muerte de una persona con mucho talento como fue Felix Grande, poeta y flamencólogo, ha terminado con la noticia del fallecimiento de Philip Seymour Hoffman otro ser humano con un talento incuestionable. Su muerte, conocida en la tarde del domingo, ha dejado en estado de shock a todos los que, como yo, amamos y respetamos a la gente con arte, capaz de emocionarnos con su trabajo.

A pesar de que ya había advertido su potente presencia en “Esencia de mujer” (“Scent of a woman” 1992, Martin Brest), fue en “Boogie Nights” (1997, Paul Thomas Anderson) donde me llamó poderosamente la atención y dos años después otros dos papeles secundarios, en “Magnolia” (1999, Paul Thomas Anderson) y en “El talento de Mr. Ripley” (“The talented Mr. Ripley” 1999, Anthony Mingella), hicieron que lo catalogara ya en ese momento como el mejor actor americano que había visto en muchos muchos años.

Magnolia-PSH2

Sin embargo, en el cine norteamericano no basta el talento para conseguir papeles protagonistas, si no que se necesita un físico muy agraciado para llegar a la cima del éxito en esa comunidad de adoradores de lo material que es Hollywood. Y el físico de Philip no era el más apropiado para hacer de héroe en cintas de aventuras, o de galán en comedias románticas, menos aún para hacer del superhéroe de turno en la enésima vuelta de tuerca al argumento que la fábrica de sueños repite dos o tres veces cada año.

Así, siguió haciendo papeles secundarios en grandes películas como “Casi famosos” (“Almost famous” 2000, Cameron Crowe), “State and main” (2000, David Mamet), “La última noche” (“25th hour” 2002, Spike Lee) o “Cold Mountain” (2003, Anthony Minghella). También participó en unas cuantas películas malas, las cuales mejoraron considerablemente con su presencia, pero no me voy a molestar en recordarlas.

El cine independiente norteamericano sí veía lo mismo que yo veía en este gran actor. Así, en 2002 protagonizó “Con amor, Liza” (“Love Lisa”, Todd Louiso) una película muy triste sobre la soledad y la sensación de pérdida de un joven viudo tras el suicidio de su esposa. Al año siguiente protagonizó una película canadiense titulada “Owning Mahowny” (2003, Richard Kwietnowski), la cual no he visto y que creo que permanece inédita en España.

3723376614_5caa096285

Hasta que llegó el año 2005 donde surgieron dos proyectos en Hollywood sobre el escritor Truman Capote, el cual no se caracterizaba por su belleza física precisamente. Por ello le dieron a este gran actor su primer papel protagonista encarnando al deslenguado escritor autor de “A sangre fría” en la película titulada simplemente “Truman Capote” (2005, Bennet Miller). Por supuesto, no desaprovechó la oportunidad llevándose el Oscar al mejor actor principal en la ceremonia del 2006 tras conseguir una simbiosis total con el personaje y apoyándose en la carencia que tiene la academia de Hollywood en premiar a los actores que se enfrentan con un personaje ya famoso. Así mismo, por este papel se llevó el Globo de Oro, el premio Bafta y otros 19 premios a lo largo y ancho de los states.

Sin duda ese 2006 fue su año más exitoso, recogiendo premios uno detrás de otro por su labor en “Truman Capote”, éxito que aprovechó para obtener al año siguiente papeles protagonistas en dos grandes películas. La primera fue “Antes que el diablo sepa que has muerto” (“Before the devil knows you´re dead”, 2007) obra póstuma de un enorme director como Sidney Lumet y en la que compartía protagonismo con Ethan Hawke. Posteriormente fue cabeza de cartel de la película independiente “La familia Savages” (“The savages” 2007, Tamara Jenkins) excelente comedia dramática que pasó totalmente desapercibida en nuestro país y que le supuso una nominación a los Globos de Oro como mejor actor en comedia o musical (sic).

Además, aprovechó otro papel secundario que le ofrecieron ese año en “La guerra de Charlie Wilson” (“Charlie´s WIlson war” 2007, Mike Nichols) para conseguir su segunda nominación al Oscar de la Academia (perdiendo ante otro enorme actor como es Javier Bardem), además de otra nominación a los Globos de Oro y a los Bafta.

No tardó mucho en tener que volver a acudir a la ceremonia de entrega de los Oscar, ya que al año siguiente volvió a estar nominado como mejor actor secundario por “La duda” (“The doubt” 2008, John Patrick Shanley), perdiendo en esta ocasión la lucha frente al también  fallecido Heath Ledger.

En 2010 se lanzó a tareas más complicadas con la que supuso su primera película tras la cámara, la aquí inédita “Jack goes boating” que también protagonizó. Como actor volvió a ser relegado inexplicablemente a papeles secundarios en películas a las que aportaba su inmenso talento. como hizo en “Los idus de Marzo” (“The ides of March” 2011, George Clooney) y “Moneyball; rompiendo las reglas” (“Moneyball” 2011, Bennet Miller).

joaquin-phoenix-philip-seymour-hoffman-the-master

Finalmente, el pasado año 2013 estrenó dos películas rodadas el año anterior y en la que le habían otorgado papeles de más enjundia. Una de ellas fue “El último concierto” (“A late quarter”, Yaron Zilberman) pequeño drama sobre un cuarteto de músicos clásicos que se ven afectados por la enfermedad de uno de ellos. La otra película estrenada en 2013, significó a mi entender su mayor logro, me refiero a  “The master”, dirigida por Paul Thomas Anderson (para el que ya había trabajado en “Sidney”, “Boogie nights”, “Magnolia” y “Embriagado de amor”). En ella, conseguía una actuación memorable compartiendo además planos con otro de los mejores actores de la actualidad como es Joaquin Phoenix. Entre ambosrellenaron los espacios de una obra compleja como ésta, en la que su director consiguió un trabajo cuyo interior se me antoja inescrutable. Nuevamente fue nominado al Oscar por su labor en esta película, nuevamente como actor secundario (aún no se por qué) y nuevamente se fue a casa de vacío.

Ahora mismo me siento triste, enfadado, desalentado y pienso en todas esas películas que Philip Seymour Hoffman no va a realizar y me doy cuenta que mi vida a partir de ahora va a ser peor que en los últimos años, ya que no voy a poder disfrutar viendo nuevas actuaciones de este monstruo de la pantalla, de este roba escenas profesional que se ha muerto demasiado pronto y al que nunca se le recordará lo suficiente.

Gabriel Menéndez 

3 comentarios a Adiós a Philip Seymour Hoffman, adiós a uno de los mejores actores norteamericanos.

  • Esteban  dice:

    Lo has dicho todo.

    Una pérdida enorme. Es una pena pensar en todo lo que Philip nos habría entregado y ya no tendremos. Era uno de los grandes del cine de los últimos tiempos. Que lástima…

    Saludos
    Esteban
    http://politocine.blogspot.com

    • celuloide  dice:

      Gracias por tu comentario. Es cierto lo que dices, da igual todo lo que digamos, la triste realidad es que ya no está y que echaremos mucho de menos el legado que nunca nos dejará debido a su temprana muerte.

      • Adrian  dice:

        Buena reflexión sobre la importancia del físico en el cine americano cuando en realidad es mucho más fresco y más verosímil ver a actores desconocidos.

Comentarios Cancelar respuesta

You may use these HTML tags and attributes: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>